Dicotomia

En Madame Bovary se ve muchos temas que se presentan de manera cotidiana. La dicotomía es un ejemplo de uno de esos temas. La dicotomía es la lucha interna que tiene una persona al dudar que decisión fuera mejor para el momento y a largo plazo. Esto se puede aplicar a la vida de cada persona. Por ejemplo, al salir a una reunión o a una fiesta, uno sabe que tomar antes de los dieciochos años es ilegal pero entra el otro pensamiento que es el deseo de tomar y poder divertirse, lo cual es argumentado por la forma de que cada individual fue criado. Yo fui criado con la moralidad de no tomar hasta cierta edad aunque esa edad es decidida por el nivel de maduración que uno puede tener cuando se habla de tomar. Similarmente también está la lucha entre estudiar y procrastinar. Uno como estudiante, siente el deber de organizarse de tal manera que los deberes sean una prioridad lo que es obstruida por la pereza, que desafortunada mente los templa hacerlos deberes mientras escuchamos música, viendo tele, o en redes sociales como Facebook. Aun que nuestras mentes y la conciencia nos dice que deberías tener toda nuestra atención y concentración en el estudio, la mayoría de las veces fallamos. Lo que nos lleva a otra dicotomía. Similarmente todas las dicotomías o la mayoría de las dicotomías son entre deseo de satisfacerse inmoralmente y con muy poca ética que son fáciles y  mientras están otras opciones que se podían decir que son más fáciles y que requieren más sacrificio que la otra opción pero lleva con si, más moral y ética. Resulta que los jóvenes al procrastinar y dejar que la pereza y la falta de entusiasmo en los deberes “gane” se ven enfrentados con la dicotomía de hacer trampa o plagiar. Como el héroe trágico (que es dueño y gran arquitecto de su propia desgracia) uno ve que por falta de dedicación y madurez, se enfrenta en una decisión aún más difícil. Al hacer trampa se roba el trabajo difícil de otro, y solo se hace daño hacia el mismo ya que no aprende nada aunque si es que no agarra una buena puntuación en el trabajo le bajaría la nota que al final le daña las oportunidades de entrar a la universidad. Lo cual siempre regresa a la lucha interna entre moralidad y deseo personal. Al final no es quien alguien es por dentro o quien podremos ser, sino son las decisiones que hacemos que definen nuestro carácter. Las decisiones de madame Bovary son quien define quien es, aunque el ambiente y la gente que rodea a Emma también toman un rol importante en las dicotomías que no solo Emma pero también otros personajes, como Boulanger.